El poder de la motivación

Cómo ayudan las palabras de motivación en la recuperación de los pacientes

Conducir al trabajo. Lavar los platos. Ir a la bodega. Dar por sentadas las tareas cotidianas es fácil, hasta que ya no puede hacerlas. Durante la recuperación tras un accidente cerebrovascular, una cirugía de rodilla o cadera, un ataque al corazón, un accidente en motocicleta o cualquier otra lesión o cirugía importante, es normal sentir confianza y esperanza un minuto, y ansiedad o temor al siguiente. Después de todo, su hogar, que alguna vez fue un refugio, de repente puede sentirse como una prisión. Las escaleras pueden parecer el Kilimanjaro.

Lo que necesita es alguien que lo motive para que siga haciendo sus ejercicios cuando usted no tiene ganas… alguien que delicadamente lo aliente para que siga adelante y lo anime, un logro a la vez. Madeleine, una fisioterapeuta de MJHS con 40 años de experiencia, hace esto todo el tiempo. Ella brinda un flujo constante de motivación cada día, fortaleciendo tanto los músculos, como la perseverancia de las personas que atiende. Su objetivo es que sus pacientes recuperen toda la independencia que puedan. Eso es lo que hace con sus pacientes, en la comodidad y privacidad de sus hogares, a través del programa MJHS Road to Recovery.

“No existe un plan que abarque todas las necesidades”, dice Madeleine. Si un paciente se recupera de un accidente cerebrovascular, la terapia del habla tal vez sea obligatoria. Para un reemplazo de cadera, la fisioterapia es fundamental. Y, en ambos casos, la terapia ocupacional podría ser útil para ayudar al paciente a volver a su vida cotidiana.

Cuando un paciente necesita más de un tipo de terapia de MJHS, los terapeutas trabajan en conjunto, “porque establecer objetivos conjuntos con nuestros pacientes (que, usualmente, incluye a un familiar o amigo cercano del paciente), no importa cuán pequeño sea el objetivo, puede ser un motivador poderoso para todos”, explica Madeleine. “Celebrar hasta las victorias más pequeñas, como caminar 10 pasos en vez de cinco el día de hoy, definitivamente ayuda a acelerar el proceso de recuperación, motiva al paciente y es muy reconfortante para el equipo de rehabilitación”.

Uno de los antiguos pacientes de cirugía de rodilla de Madeleine es una mujer de 74 años que dirigía su propio negocio. Si su paciente no podía viajar hasta el centro, no podía trabajar para mantenerse. Por eso, Madeleine fue a su casa durante semanas para ayudarla a recuperarse. Hicieron ejercicios de estiramiento. Pusieron peso en cada pierna. Subieron y bajaron las escaleras. Caminaron hasta la puerta de entrada. Cada paso era un triunfo y las acercaba más a los objetivos que habían establecido. Un día, Madeleine vio a su paciente tomar el autobús. La cara de su paciente se iluminó. Madeleine estaba orgullosa. Compartieron un momento. Fue maravilloso e inspirador.

Madeleine y otros terapeutas de MJHS saben que la recuperación toma su tiempo. Ellos ven, todos los días que la motivación es un impulso para todos, los pacientes, la familia, los amigos y hasta para cada terapeuta, para trabajar más, sentirse mejor y, lo que es más importante, recuperar el sentido de cotidianeidad y autonomía. Esa determinación, ese espíritu, esa motivación es mucho de lo que ofrece y brinda MJHS Road to Recovery. Ese es el poder de la motivación.